Los paneles solares, como muchos dispositivos y herramientas, necesitan mantenimiento. Esto es importante para que duren más y funcionen mejor. Las paneles fotovoltaicos no son una excepción, pero su mantenimiento es mucho menor en comparación a otros productos.
¿Por qué es importante el mantenimiento de los paneles solares?
Una de las ventajas de los paneles es que se trata de un elemento estático, es decir, no contiene partes móviles, lo que suele implicar, reparaciones. Es capaz de funcionar por el simple hecho de recibir radiación solar y tiene una vida útil mínima esperada de 25 años.
Su mantenimiento estará encaminado pues, en aquellas operaciones que le permitan sacar el mayor aprovechamiento posible. De esta forma, contaremos con equipos de mayor duración.
¿Cómo realizar el mantenimiento de los paneles solares?
La energía que podemos obtener de los paneles fotovoltaicos depende fundamentalmente de la incidencia de la radiación solar que les llega. Una buena forma de empezar será disponerlos con una orientación e inclinación adecuados a la ubicación donde nos encontremos obteniendo así, un aprovechamiento máximo.
Evitar la presencia de elementos que puedan provocar sombras en los paneles solares (al menos que no haya en las horas centrales) también es un factor a tener en cuenta para alcanzar el máximo rendimiento. Ten presente que las sombras tienen un efecto negativo en el panel solar.
Podemos diferenciar dos tipos de sombras:
Algunos consejos para el mantenimiento de los paneles solares
Es en este último punto donde, aplicando simples acciones de limpieza del panel solar, podemos tener un buen mantenimiento del generador fotovoltaico. Éstas consistirán básicamente en la limpieza de las superficies donde están las células fotovoltaicas mediante una esponja con agua y un poco de jabón. Está acción la repetiremos unas 4-5 veces al año. Se recomienda realizarla siguiendo una serie de pautas, a saber:
-No utilizar detergentes abrasivos o útiles de limpieza. Esto podría dañar la superficie del panel solar.
-El agua que se utilice no debe de contener sales minerales en grandes cantidades ya que pueden quedarse adheridas al panel.
-Para una limpieza más fácil, mojar abundantemente el panel solar para que se ablande la suciedad. En caso contrario, corremos el riesgo de rayar la superficie del panel por exceso de fricción.
-Evitar en la medida de lo posible, la limpieza en los días con viento. Evitaremos que se adhieran las partículas en suspensión sobre la superficie mojada.
-Evitar el lavado a presión ya que podemos dañar el módulo.
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